Nos alojamos aquí 2 noches, ha sido justo lo que esperábamos. El hotel estaba muy limpio y tenía un interior bonito, un edificio bonito. El personal era bueno y amable, nos dieron toda su atención. La habitación es ordenada y sorprendentemente nueva con una cocina, quedamos muy satisfechos. Nos han gustado un montón los restaurantes muy buenos del hotel. Hotel Marie en Skagen superó nuestras expectativas en todos los aspectos. La limpieza y la belleza del interior del hotel nos impresionaron desde el principio. El personal fue extremadamente amable y atento durante toda nuestra estancia. Además, la habitación que nos asignaron era ordenada, nueva y contaba con una cocina, lo cual nos dejó muy satisfechos. Sin duda, destacaría los restaurantes del hotel, los cuales nos sorprendieron gratamente con su alta calidad. ¡Una experiencia altamente recomendable en Skagen!

Ubicación: el hotel estaba en las proximidades de varios lugares, como restaurantes y del centro. La cama era cómoda, el baño muy limpio y había una caja fuerte privada, una plancha y tabla de planchar, una mesa de trabajo en la habitación...

Las habitaciones bien decoradas y los baños muy limpios eran lo suficientemente espaciosos. Tener wi-fi y un secador de pelo en resultó ser bueno. La ubicación era excelente y buena, el museo de Skagen está a dos pasos. Lo suficientemente cerca de un restaurante y de la principal calle comercial y del centro.

La ubicación del hotel es excelente, cerca de varios lugares como restaurantes y la principal calle comercial. Ideal para pasear cerca del Museo de Skagen. La habitación era espaciosa y contaba con una cocina. El personal fue muy amable. La decoración fresca de la habitación me encantó.

El hotel tiene una ubicación genial; está cerca de un parque precioso, justo en el centro y en una zona muy mona. Las sábanas son de calidad y las instalaciones están impecables. Además, hay un patio interior con mesas y sillas, ideal para relajarse y disfrutar de la vegetación que lo adorna.

La única pega es que el desayuno podría ser más variado.

El trato amable y cercano del personal hace que te sientas como en casa. Además, la ubicación del hotel en una zona mona, cerca de un parque y justo en el centro, es simplemente perfecta. Por si fuera poco, encontré las habitaciones muy cómodas, con ese toque de elegancia que tanto me gusta, y con productos Rituals en el baño. ¡Una maravilla! debo mencionar el desayuno incluido, que fue delicioso y completo.

Todo fue genial!

La amabilidad del personal, la información proporcionada, el trato cálido, la calidad de las sábanas, la excelente ubicación cerca de todo.

No había nada que no me gustara.